LA FAMILIA BURRON

EDITORIAL DEL AVE FÉNIX
La Familia Burrón
21 de Agosto de 2004
Por: Hugo Escoto García

Es curioso… la vida es muy extraña… suele dar muchas vueltas y llevarnos entre las patas…

Estamos a punto de tomar una decisión muy drástica, con relación a la ubicación de nuestro hogar; las cosas no salieron como las habíamos planeado y nos tenemos que regresar a vivir a Satélite; la verdad no me disgusta la idea, porque finalmente es la casita que nos vio crecer como familia, es la casita que recibió los primeros pasitos de mi hija cuando comenzó a caminar, sus primeras palabras, sus primeros logros; fue allí donde nació “El Ave Fénix” en medio de la complicidad de la noche en el silencio… fue en esa casa donde se verificaron los momentos más angustiosos de nuestra vida familiar, y sin dudarlo los más hermosos y representativos…


Satélite siempre se me ha imaginado como el escenario ideal para filmar en un futuro una película sobre “La Familia Burrón”, existen en ese lugar personajes prototípicos que bien podían haber sido el origen de la inspiración del autor de esa revista… por cierto, me voy a permitir abrir un breve paréntesis para comentar que hace solo unos días, el creador de esta maravillosa revista recibió un reconocimiento público por su aportación al bienestar de los mexicanos a través de su visión particular de la vida.


Mi reconocimiento sincero a Don Gabriel Vargas por este maravilloso premio; yo creo que una parte de mi vida está relacionada al placer de poder leer las vicisitudes de una familia común que le pasó de todo en este México de contrastes que sacude a la población con los problemas de su economía y política, pero sobre todo de la muy particular forma de ser de los mexicanos.

La Familia Burrón desde su concepción ha tratado muchos temas referentes a la vida política, económica, social y cultural de México.
La honradez, la corrupción, la riqueza y la pobreza, las crisis económicas, los problemas de inseguridad, el alza de precios, las incomodidades de las obras públicas, la libertad de expresión, la educación, etc. siempre con el ánimo de resolver los problemas cotidianos y tener esperanza, luchando contra las adversidades.

La Familia Burrón fue creada por Don Gabriel Vargas en el año 1948, y ha producido hasta el momento a 53 personajes originales.

La Familia Burrón nos presenta la vida de Doña Borola y Don Regino Burrón, una familia de clase media baja que sufre en carne propia los problemas de supervivencia a los que está sometida la población en México… la lucha se convierte poco a poco en una ingeniosa creación de cuadros cómicos y de recursos para poder hacer frente a la situación.

Doña Borola es un verdadero genio para transformar su entorno, su inventiva no conoce límites, y puede llegar a extremos sensacionales como bailar en un “teibol” o hacer de bailarina exótica con tal de darle de comer a sus chilpayates; es capaz de fabricar albóndigas con papel periódico, y visitar a sus amigos linajudos haciendo valer su sex appeal con tal de que no les falte nada a sus hijos. A pesar de que ama a su esposo y lo respeta mucho, le gusta la pachanga, la música, el reventón… le da vuelo a la hilacha cada vez que tiene la oportunidad y no se mide ni se detiene ante ninguna circunstancia con tal de defender como fiera a su familia.



Muevo mucho las caderas
Las agito al caminar
¿Por qué te desesperas?
No lo puedo remediar
Haciendo así, cuchichí, cuchichí
Haciendo así, cuchichí, cuchichí…




Borola es presidenta de la Asociación:


“AYUDAME PRIMERO, QUE YO LO HARÉ DESPUES”

Grupo humanitario que ayuda a todos los desarrapados que pululan por la “canica”, (especialmente su familia)

Don Regino Burrón en cambio es un humilde peluquero que lucha todos los días por llevar el sustento diario a su familia, es el prototipo de la decencia, de la humildad y de la sabiduría; a pesar de ser pobre es un hombre incorruptible, que tiene bien cimentados sus principios morales y trata de educar a sus hijos como su conciencia le dicta.


Quién es quién en los Burrón
La Familia Burrón está constituida básicamente por Don Regino Burrón, su esposa Borola Tacuche y sus 3 hijos: Regino (más conocido como “El Tejocote”), Macuca y Fóforo Cantarranas.

Los hijos de Borola son dos chicos maravillosos… Macuca, que siempre se me ha imaginado a Carmelita mi hermana, por su esbelta figura, y por las características de su personalidad, porque Macuca es tímida, respetable y centrada y siempre actúa como acompañante de su mamá constituyéndose en su conciencia… exactamente como hace con la Chiquis.
Me refiero a Foforito con el apellido Cantarranas porque en realidad es hijo adoptivo de esta humilde y humana familia. Foforito fue un ayudante de Don Regino Burrón en “El Rizo de oro”, peluquería de la que éste consumado maestro de la tijera está a cargo, negocio que constituye el sustento de la familia.
El verdadero padre de Foforito es Don Susano Cantaranas, pepenador y consumado borracho quien prácticamente abandonó al niño desde pequeño en manos de esta familia. Cada que puede recurre al chantaje para “vender” a su hijo. De cualquier manera, Fóforo es uno más de los miembros de los Burrón, pues es querido y tomado como tal, por lo que en adelante nos referiremos a él como un auténtico Burrón.
Foforito es un excelente niño. Además de ayudar a su papá en la peluquería junto con su hermano “El Tejocote”, es un buen hijo, estudiante y amante de la música. Toca lo que en la revista llaman “La vihuela”, que es una especie de banjo.
Es importante hacer notar la bondad de la familia, que adopta al niño a pesar de estar “en la última miseria”, como diría alguno de los personajes

La cabeza de la Familia: Don Regino Burrón, excelente peluquero, buen hombre, esposo, responsable, extremadamente serio y trabajador.
Don Regino viene de una familia de extracto bastante humilde, tal como la que ahora encabeza. Desde pequeño, al haber perdido a su padre, tuvo que hacerse cargo de sus hermanos y su madre. Sin embargo, es una persona auténticamente feliz, ama a su familia, su oficio y es el prototipo de una persona positiva y buena.


Borola, su esposa, es casi el personaje central de la revista. Alegre, fiestera y dicharachera. Borola imprime un toque de gracia a la situación más difícil que pueda presentarse, con un carácter completamente opuesto al del “chaparrín” (Regino). Ella se jacta de ser de “la jai” (hight, de la alta sociedad) y siempre trata de aparentar una posición social superior a pesar de su calidad real tan humilde. Sin embargo, lejos de lo que mucha gente pueda pensar, no es una persona realmente materialista. Su familia era de posición acomodada, pero cuando Borola perdió a sus padres se fue a vivir a Francia con su tía, Doña Cristeta Tacuche (hermana de su padre), archimillonaria y extravagante mujer. Por eso puede decirse que Borola efectivamente perteneció a la alta sociedad, a la que renunció por su “chaparrito”, del cual estuvo enamorada desde niña como lo muestran diversos episodios que el autor presenta de estas épocas. Borola a pesar de pasarse la vida quejándose de su situación, es una persona muy humana que frecuentemente realiza obras para ayudar a los niños, a su esposo, a los pobres, defiende a su vecindad (ubicada para conocimiento de los lectores en el Callejón del Cuajo Número Chorrocientos chochenta y chocho), cada que el inmueble es amenazado con derrumbarlo para la construcción de ejes viales; no puede soportar ver que los niños que no van a recibir juguetes el día de reyes por la difícil situación de sus padres en fin... tiene el corazón noble debajo de su carácter explosivo.
Entre lo más chusco de la historieta destacan los medios que utiliza para salir adelante, para ayudar a su esposo, a los vecinos, o para llevar a cabo cualquier idea que de repente se le mete. Es capaz de robar, disfrazarse, coquetear; es una persona como puede haber miles en la vida real.

Doña Cristeta Tacuche, la voluminosa tía de Borola, archimillonaria y enamoradiza mujer, siempre ha tenido mala suerte en sus “amoríos”. Ya sea que es engañada o termina viuda, pero eso sí, cada vez, y como consecuencia de su fracaso, es más rica. Ella vive en Francia y es un personaje que representa un poco la aristocracia europea.
Personajes ligados con ella: La secretaria particular, Boba Licona y su eterno enamorado Roquefort “El rey del queso”.

Borola representa la anarquía, el abuso, la trampa, el exceso, la fantasía, la insumisión, el riesgo, la inconmensurable posibilidad del goce de la vida…
Yo creo que todos nosotros en algún momento de nuestra vida nos hemos sentido así, nos gustaría mandar a volar a todo el mundo, haciendo lo que nos diera la gana, rompiendo con todos los parámetros establecidos por la sociedad.
Don Regino en cambio representa un dechado de virtudes, la sensatez personificada, la modestia, la honradez a toda prueba, la incorruptibilidad… pero también la perfecta expresión del tedio y la falta de imaginación.
Entre muchos personajes que podría mencionar está Don Briagoberto Memelas el mero mero Cacique de la “Coyotera”, eterno enemigo de Don Juanón Teporochas, el Cacique de San Cirindango de la Iguanas.
Floro Tinoco y Rico Bombón, Joven chorromillonario y su primo multimilloneta…
La Divina Chuy es un personaje maravilloso de gratos recuerdos para mi papá, porque el sangrón le decía así a mi mamá…
Resulta que la Divina Chuy es una bailarina exótica que levanta polvareda cuando se presenta en el cabaret.
Sinfónico Fonseca y su Bombardón, es un niño virtuoso que es amigo de Foforito Cantarranas que toca maravillosamente la vihuela, que no es otra cosa que un banjo.
Hay otro personaje muy curioso, se trata de Ruperto Tacuche, hermano de Borola, conocido en otros tiempos como “El Rey del Hampa”, es un personaje trágico porque le va como en feria, es una especie de gangster que siempre vive amenazado.
De todas sus aventuras y locuras, Borola regresa siempre derrotada a su guarida… al horrísono patio de la vecindad del que por lo visto le es imposible escapar.
Como habrán adivinado, este mundo me es muy familiar, y ha significado mucho para mí durante años de mi vida.
Yo creo que los genios no se dan en maceta, y que cuando aparecen en tu vida debes aprovecharlos, aprender de ellos y regodearte con la realidad.
Supongo que por el entusiasmo con el que estructuré esta entrega fui repetitivo y redundante, la verdad lo siento, todo esto lo escribí de una tirada… incorporé alguna parte que no es de mi autoría, metí unas imágenes necesarias y lo disfruté muchísimo… ojalá vivas la experiencia de leer esta entrega con felicidad.
Hasta aquí mis comentarios… y hasta aquí mis palabras sin reposo.